Suomi

Finlandia,

Después de haber viajado tanto por Europa ,teniendo parte de familia en el país escandinavo y gracias a los vuelos baratos de Ryanair tenía que visitar este país.

¿Mi opinión?

Es un país muy diferente a los que he estado…

Tan diferente que cambié las calurosas playas de Australia por la nieve Finlandesa y la actitud alegre y despreocupada de los Australianos por las caras largas de Finlandia.

Quizás, la falta de sol y el frío vuelvan a la gente menos simpática, de hecho, cuando participé en el proyecto “No winter blues” de las Islas Canarias, promocionamos el calor y el buen tiempo de las islas para evitar algo llamado “Winter Blues”.

Un fenómeno típico de los países del norte de Europa que se caracteriza por síntomas cercanos a la depresión que experimentan los habitantes de estos países.

Y en Finlandia, particularmente, dónde sólo tienen 3 o 4 horas de sol en invierno este efecto es crítico.

 

Foto: Paisajes antes y después

Incluso, me ofrecieron un trabajo en un restaurante mexicano pero después de darle tantas vueltas a la cabeza y analizar los pros y los contras decidí no quedarme allí y volver un tiempo a mi lugar de origen, las Islas Canarias,pasando por Londres, por lo que en menos de un mes ya había volado unas 10 veces.

 Mis primos Lauri y Victoria como buenos Finlandeses me invitaron a probar las cervezas locales

No todo es nieve y frío en Finlandia, quizás así sea en Tampere, dónde está el aeropuerto de Ryanair, a unos buenos 180 kilómetros de el centro de Helsinki y donde no paraba de nevar en pleno Marzo!

En cambio la capital Finesa tiene una arquitectura increíble que parece sacada de un cuento medieval: edificios al más puro estilo de castillos medievales, calles peatonales con adoquines y un largo etcétera de detalles arquitectónicos muy cuidados.

Una especial mención la merece el señor de la foto, que se dedica a tocar botellas llenas de agua en pleno centro! Lo que ayuda a transportarte a esos cuentos mediavales de los que hablé antes. (Haz click en la foto para ver un vídeo)

 

 

Y no sé si este señor que toca las botellas será como el resto de la población Finlandesa ya que una de las cosas que más me llamó la atención de aquí es la cantidad de gente que fuma, además de toda la gente que juega a las máquinas traga-perras que se encuentran incluso en los supermercados.

 

Foto: A pesar de la gran cantidad de gente que fuma, en Helsinki se preocupan mucho por la calidad de vida de la gente tal y como podemos ver en esta pantalla interactiva en un parque con la que puedes hacer deporte tocando la pantalla y siguiendo las instrucciones de un entrenador virtual. Innovación en estado puro.

Otra cosa que llama la atención es la mentalidad de la gente de respetar a los demás y a las cosas que son de todos, por ejemplo, mucha gente pueda dejar sus bicis sin un candado puesto y esperar a que el día siguiente sus bicis estén allí.

Snus: rayadura de tabaco típica de los países escandinavos, aunque prohibida su venta en Finlandia, mucha gente la compra en el país vecino Suecia del que es originario

(se introduce una dosis debajo del labio y produce los mismos efectos que fumar un cigarrillo)

En cuanto a cosas que hacer en Helsinki, vale mucho la pena visitar  la zona de “kauppatori” cerca del mar y los edificios más emblemáticos de Helsinki en el que poder disfrutar de algo tan típico como sardinas fritas o salmón o coger el ferry que conecta Helsinki con Tallin (Estonia) en menos de 2 horas y por un precio bastante económico.

Foto: Parece mentira que en verano cuando el agua se deshiele esto sea una playa!

Otra cosa que no se puede perder en Helsinki es visitar una sauna y disfrutar de el calor intenso mientras observas el paisaje helado del exterior (no apto si eres demasiado pudoroso ya que los Finlandeses utilizan la sauna desnudos, eso sí, los hombres no se mezclan con las mujeres en la Sauna)

Foto:  Catedral de Helsinki,uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad.

Para finalizar he de decir que Finlandia, concretamente Helsinki me parece un país bastante avanzado en muchos aspectos, con el único inconveniente del mal tiempo y de que tenga un idioma tan difícil.

Como anécdota, respecto a las diferencias lingüísticas, una vez, al bajar al supermercado de la esquina para comprar  y al ver tantos botes parecidos que contenían yogur y otros tipos de productos se me hizo una odisea comprar un simple paquete de leche (la empleada no hablaba inglés).

Al final pude averiguar que lo que me llevaba era leche porque en Sueco, un idioma también oficial en Finlandia y con un cierto parecido al inglés se dice Mjölk, si no hubiéramos terminado poniendo Yogur a la lasaña….